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Cómo preparar tus finanzas en el caso de que se produzca un desastre natural

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Es verdad que, independientemente de dónde vivas, es probable que te enfrentes a algún tipo de desastre al menos una vez en la vida. Quizá vivas en una zona propensa a sufrir desastres naturales, como terremotos, incendios, inundaciones, huracanes o tornados. También existen posibles desastres financieros, como una recesión o la pérdida de ingresos. Estar preparado/a para posibles desastres es una buena idea, ya que puede ayudar a reducir el miedo, la ansiedad y las pérdidas. Si estás preparado/a para un desastre, tienes muchas más posibilidades de sobrevivir y prosperar, aunque la situación sea caótica a tu alrededor. Queremos que sepas que TurboTax está aquí para mantenerte al día con información importante acerca del alivio tributario que puede ser de ayuda durante estos tiempos difíciles. 

Decide para qué desastres te vas a preparar

Existen muchos tipos de desastres o emergencias. Si bien no puedes prepararte para todos, al principio puede resultarte útil tomar una decisión sobre el tipo de desastre que vas a considerar. Puedes plantearte las siguientes preguntas:

  • ¿Tendrás que abandonar tu casa?
  • Si te vas a refugiar en tu casa, ¿tendrás electricidad o agua corriente?
  • ¿Habrá productos en las tiendas vecinas o los estantes estarán vacíos?
  • ¿Tendrás acceso a efectivo a través de tarjetas de crédito o cajeros automáticos?

Responder estas preguntas puede resultarte útil para comenzar a crear un plan. Si no tienes la seguridad de por dónde comenzar y te sientes tan abrumado/a que no consigues avanzar, simplemente decide empezar por algo. En una emergencia (o incluso cuando te preparas para una), lo mejor que puedes hacer es tener listos algunos consejos de preparación ante desastres y ponerlos en práctica. 

Si no sabes qué debes hacer primero, comienza por crear un kit para 72 horas, a veces conocido como “bolsa de emergencia”. Puede ser una mochila o un bolso de lona para cada miembro del hogar o de la familia, con ropa, alimentos no perecederos, dinero y otros elementos que podrías necesitar si tuvieras que abandonar tu casa apresuradamente. Tener esto preparado es especialmente importante si vives en una zona propensa a incendios forestales y de la que es posible que te evacúen prácticamente sin aviso. Ready.gov brinda consejos sobre cómo crear tu propio kit de preparación en caso de desastre.

Crea un plan

Una vez que hayas decidido los tipos de desastre para los que te vas a preparar, lo primero que debes hacer es crear un plan. Esta es una de las razones por la que es tan importante decidir primero para qué tipo de desastre te vas a preparar. Es difícil crear un plan si no sabes para qué lo estás planificando. Según tu personalidad, es posible que te resulte más fácil decidir para qué desastres te vas a preparar y crear un plan que te mantenga concentrado/a en momentos difíciles.  Una vez que hayas hecho el plan de preparación para un tipo de desastre, siempre puedes revisarlo. 

Cómo preparar tus finanzas para un desastre

Además de prepararte para desastres naturales, también debes considerar el nivel de preparación de tus finanzas. Una emergencia o un desastre financiero se puede presentar de formas muy distintas. Por ejemplo, podría ser la pérdida del empleo, una reducción de horas o un importante gasto imprevisto.

Una de las mejores medidas que puedes tomar para ayudar a preparar tus finanzas en caso de desastre es contar con un fondo de emergencia. Si no tienes ningún fondo de emergencia, puedes empezarlo con solo $1,000. Luego, puedes continuar aumentándolo con el tiempo, de acuerdo con tus otras prioridades financieras. Contar con varios meses de gastos en un fondo de emergencia puede contribuir considerablemente a asegurarte de que estás preparado/a para diferentes tipos de desastre financiero. 

Alivio en situaciones de desastre del IRS 

Normalmente, una vez que la FEMA (Agencia Federal para el Manejo de Emergencias) designa un área como zona de desastre a nivel federal, el IRS (Servicio de Impuestos Internos) proporciona ayuda en forma de prórrogas de fechas límite para la presentación o el pago de impuestos, y otros alivios tributarios.

Una manera de obtener ayuda con tus gastos si te ha afectado un desastre natural consiste en reclamar la exención de impuestos por pérdida por hecho fortuito.

Puedes consultar el sitio web de la FEMA para ver si tu área ha sido declarada zona de desastre federal. Si es así, es posible que tengas derecho a reclamar pérdidas fortuitas como deducción detallada en tu declaración de impuestos.  

No te preocupes, TurboTax se ocupa de todo. Puedes obtener más información sobre quiénes pueden tener derecho a alivios y qué tipo de alivio tributario se ofrece

Volver a ello y revisar

Una vez que tengas el plan listo y te sientas preparado/a para al menos algunos tipos de desastres, no se trata de meterlo todo en una caja y olvidarse de ello. Una buena idea es volver a ver y repasar el plan de preparación regularmente y asegurarte de que todo siga teniendo sentido. Renueva los alimentos, cambia la ropa y revisa a grandes rasgos el plan. Si sientes que estás bien preparado/a, podría ser un buen momento para ver si quieres ampliarlo a otros tipos de desastres potenciales.

Una estrategia para revisar si estás preparado/a consiste en verificar tus kits de preparación cada seis meses, cuando ocurre el cambio de hora. Puede ser un buen recordatorio para la revisión periódica no solo de tu preparación en caso de desastre, sino también de tus planes generales. Si tienes ropa dentro de la bolsa de emergencia, puedes ir cambiándola cada seis meses para adaptarla a la temporada. Esto es especialmente importante si tienes niños pequeños, ya que la ropa y los accesorios suelen quedarles chicos rápidamente.

Conclusión

Los desastres se pueden presentar de muy diversas formas y tienen un impacto variable en la vida cotidiana. Estar preparado/a para desastres puede ayudarte a mantener la tranquilidad y controlar la ansiedad, lo que aumenta las probabilidades de que los superes con éxito. Decide para qué tipo de desastre quieres comenzar a prepararte y crea un plan. Usa los recursos que tengas disponibles, como amigos, familiares e Internet. Una vez que tengas el plan, revísalo regularmente cada seis meses aproximadamente y asegúrate de que siga teniendo sentido para ti. Si bien todos confiamos en que no se produzcan desastres, estar preparado/a te ayudará a asegurarte de que te encuentres en la mejor situación posible si llega a ocurrir.

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